Y sucedió que, como si hubiera sido cosa ligera para él andar en los pecados de Jeroboam, hijo de Nabat, tomó (m) por esposa a Jezabel, la hija de Etbaal, rey de los sidonios, y fue y sirvió Baal y lo adoró.

(m) Por cuya influencia cayó en una idolatría perversa y extraña y una persecución cruel.

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