Aquel día el rey Asuero entregó la casa de Amán, enemigo de los judíos, a la reina Ester. Y Mardoqueo (a) vino ante el rey; porque Ester le había dicho lo que él [era] (b) para ella.

(a) Es decir, fue recibido en el favor y la presencia del rey.

(b) Que él era su tío y la había criado.

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