Y miró, y vio un pozo en el campo, (b) y, he aquí, había tres rebaños de ovejas acostados junto a él; porque de ese pozo dieron de beber a los rebaños, y había una gran piedra sobre la boca del pozo.

(b) Así fue dirigido por la providencia de Dios, quien lo llevó a la casa de Labán.

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