He aquí todos los que encendéis fuego, que os rodeáis de chispas: andad a la luz de vuestro fuego y a las chispas que habéis encendido. Esto lo tendréis de mi mano; yaceréis en dolor.

(m) Has buscado consuelo con tus propios designios, y has rechazado la luz y el consuelo que Dios te ha ofrecido; por tanto, permanecerás en dolor y no serás consolado.

Continúa después de la publicidad
Continúa después de la publicidad