(8) В¶ He aquí, yo avanzo, pero él no está allí; y hacia atrás, pero no puedo verlo: (9) A la izquierda, donde él trabaja, pero no puedo verlo; se esconde a la derecha, y no puedo verlo.

De qué se queja Job aquí, ¡cuán plenamente lo sabe todo el pueblo de DIOS! Lector, ¿no has sabido lo que es estar buscando a JESÚS y, como la iglesia de antaño, enviando a menudo la pregunta, sin obtener una respuesta satisfactoria: ¿Has visto al amado de mi alma? Almas preciosas que buscan están en la búsqueda de JESÚS, en la oración privada, en la meditación, en la lectura y en las ordenanzas públicas; escuchar su evangelio predicado; sentado bajo los medios; y, sin embargo, a menudo permanecen sin renovarse y sin el disfrute de la presencia del Redentor.

No obstante, conviene recordar siempre, en estas ocasiones, que JESÚS está presente; él está mirando, está excitando el deseo en el corazón, y poco a poco se encontrará con el pobre buscador. Isaías 45:19 ; Salmo 27:8 .

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