El Espíritu Santo se complace en tener el mismo día registrado para información de la iglesia en todas las edades, en el que se llevó a cabo este gran evento. Y si el Lector tiene curiosidad por hacer el cálculo, encontrará que era el tiempo exacto, (faltando sólo cinco días) de cuarenta años, que el Señor había dicho que Israel debería vagar por el desierto. ¡Lector! como aprendemos de aquí que Dios registra sus misericordias, ¿no deberíamos tú y yo registrarlas también? ¿Y podemos mirar hacia atrás al tiempo, tenemos el memorándum al que siempre debemos recurrir, cuando el Señor nos llevó a través del Jordán espiritual hacia la conquista de los cananeos que aún estaban en la tierra? Si no es así, ¿el trabajo aún no ha comenzado? Estas son preguntas solemnes: Señor, por tu Espíritu Santo escríbelas en nuestros corazones.

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