Para realzar el tema, el salmista hace una declaración comparativa entre la existencia eterna, inmarcesible e inmutable de Jehová; y la condición momentánea, perecedera y fluctuante de los príncipes y de toda criatura que respira. ¡Lector! contemple esto, y aprenda de él lo que las Escrituras sostienen al respecto, Salmo 102:1 .

Continúa después de la publicidad
Continúa después de la publicidad