• Deuteronomio 12:23

    Solo cuídate de no comer la sangre, porque la sangre es la vida; no comerás la vida junto con la carne.

  • Deuteronomio 12:24

    No comerás la sangre, sino que la derramarás en la tierra como agua.

  • Deuteronomio 12:25

    No comerás de ella, para que te vaya bien a ti y a tus hijos después de ti, cuando hagas lo recto ante los ojos del SEÑOR.

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