• Ezequiel 47:6

    Y me preguntó: “¿Has visto, oh hijo de hombre?”. Después me condujo y me hizo volver a la ribera del río.

  • Ezequiel 47:7

    Cuando volví, he aquí que en la ribera del río había muchísimos árboles, tanto a un lado como al otro.

  • Ezequiel 47:8

    Y me dijo: “Estas aguas van a la región del oriente; descenderán al Arabá y llegarán al mar, a las aguas saladas; y las aguas serán saneadas.

  • Ezequiel 47:9

    Y sucederá que todo ser viviente que se desplace por dondequiera que pase el río vivirá. Habrá muchísimos peces por haber entrado allá estas aguas, pues las aguas serán saneadas. Y todo aquello a donde llegue este río vivirá.

  • Ezequiel 47:10

    Y sucederá que junto a él habrá pescadores, y desde En-guedi hasta En-eglaim será un tendedero de redes. Sus peces, según sus especies, serán tan numerosos como los peces del mar Grande.

Continúa después de la publicidad