• Filipenses 3:1

    Por lo demás, hermanos míos, regocíjense en el Señor. El escribirles las mismas cosas a mí no me es molesto, y para ustedes es más seguro.

  • Filipenses 3:2

    ¡Guárdense de los perros! ¡Guárdense de los malos obreros! ¡Guárdense de los que mutilan el cuerpo!

  • Filipenses 3:3

    Porque nosotros somos la circuncisión: los que servimos a Dios en espíritu, los que nos gloriamos en Cristo Jesús y los que no confiamos en la carne.

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