• Hechos 2:34

    Porque David no subió a los cielos, pero él mismo dice: El Señor dijo a mi Señor: “Siéntate a mi diestra,

  • Hechos 2:35

    hasta que ponga a tus enemigos por estrado de tus pies.

  • Hechos 2:36

    Sepa, pues, con certidumbre toda la casa de Israel, que a este mismo Jesús a quien ustedes crucificaron, Dios le ha hecho Señor y Cristo.

  • Hechos 2:37

    Entonces, cuando oyeron esto, se afligieron de corazón y dijeron a Pedro y a los otros apóstoles: — Hermanos, ¿qué haremos?

Continúa después de la publicidad