• Hechos 8:22

    Arrepiéntete, pues, de esta tu maldad y ruega a Dios, si quizás te sea perdonado el pensamiento de tu corazón;

  • Hechos 8:23

    porque veo que estás destinado a hiel de amargura y a cadenas de maldad.

Continúa después de la publicidad