• Marco 12:6

    »Teniendo todavía un hijo suyo amado, por último, también lo envió a ellos diciendo: “Tendrán respeto a mi hijo”.

  • Marco 12:7

    Pero aquellos labradores dijeron entre sí: “Este es el heredero. Vengan, matémosle, y la heredad será nuestra”.

  • Marco 12:8

    Y lo prendieron, lo mataron y lo echaron fuera de la viña.

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