• Marco 8:2

    — Tengo compasión de la multitud, porque ya hace tres días que permanecen conmigo y no tienen qué comer.

  • Marco 8:3

    Si los despido a sus casas en ayunas, se desmayarán en el camino; y algunos de ellos han venido de lejos.

  • Marco 8:4

    Sus discípulos le respondieron: — ¿De dónde podrá alguien saciar a estos de pan aquí en el desierto?

  • Marco 8:5

    Y les preguntó: — ¿Cuántos panes tienen? Ellos dijeron: — Siete.

  • Marco 8:6

    Entonces él mandó a la multitud recostarse en tierra. Tomó los siete panes y, habiendo dado gracias, los partió y daba a sus discípulos para que ellos los sirvieran. Y ellos los sirvieron a la multitud.

  • Marco 8:7

    También tenían unos pocos pescaditos. Y después de bendecirlos, él mandó que también los sirvieran.

Continúa después de la publicidad