Pero Filipo fue encontrado en Azoto; y pasando, predicaba en todas las ciudades, hasta que llegó a Cesarea.

Bien podemos imaginarnos la escena: un hermoso día de otoño, la llanura relativamente deshabitada que se extiende a ambos lados, el conductor del carro medio dormitando sobre sus líneas, los dos hombres concentrados en el rollo sagrado. Nótese que Lucas se refiere al contenido del pasaje de la Escritura como de una cantidad fija, un libro que todos los judíos conocían con ese nombre. Habiendo leído juntos una vez más el pasaje en cuestión, el eunuco preguntó a Felipe si el profeta estaba hablando aquí de sí mismo o se refería a otra persona.

Su conocimiento de la profecía y la enseñanza que había recibido no le permitieron decidir este importante punto. Y Felipe, lleno del gozo del misionero cuando encuentra un ansioso indagador de la verdad, abrió la boca para un largo discurso. Difícilmente podría haber encontrado un texto más adecuado para exponer su gran tema, porque su tema era Jesús y el maravilloso mensaje acerca de Él. A partir de los muchos y claros y bellos textos del Antiguo Testamento, tuvo una excelente oportunidad de mostrar el cumplimiento de la profecía en el caso de Jesús de Nazaret.

E indudablemente habló también de la gran comisión del Señor que había encomendado a sus discípulos, "de enseñar a todas las naciones, bautizándolas en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo", Matteo 28:19 . Y mientras Felipe todavía estaba pintando las glorias de Cristo en colores brillantes, el carro se acercó a uno de los pequeños arroyos o estanques que, incluso en la estación seca, pueden contener un poco de agua.

Y el eunuco, medio ansioso y medio temeroso, señala el agua y pregunta si habrá algo que le impida ser bautizado. Entonces Felipe planteó la pregunta que es fundamental en toda verdadera fórmula para bautizar, diciendo que su deseo muy bien puede ser concedido si cree de todo corazón. Y el eunuco, lleno de la dulzura y de la belleza del anuncio evangélico que acaba de escuchar, pronuncia su confesión: Creo que Jesucristo es el Hijo de Dios: fórmula breve, pero completa, que equivale a una confesión en el Dios uno y trino. .

Entonces el oficial mandó detener el carro, y tanto Felipe como el eunuco descendieron al agua, o dentro de ella, donde fue bautizado este último, no indicándose el método, aunque probablemente fue por vertido o por inmersión. No se atribuye ningún peso al método o forma del bautismo, siempre que el agua se use y se aplique con las palabras de la institución. Pero cuando salieron del agua, el Señor, el Espíritu del Señor, hizo un milagro al quitar repentinamente a Felipe del costado del eunuco y de su vista.

Sin embargo, ya no dependía de este maestro; había oído los hechos esenciales que le permitieron en adelante comparar el Antiguo Testamento con el Nuevo, y por lo tanto siguió su camino gozoso. Cuenta la antigua tradición que el eunuco llevó la gloriosa noticia del Evangelio a sus compatriotas, y así se convirtió en el fundador de la Iglesia abisinia. Por muy cierto que pueda ser este informe, lo cierto es que él, al menos para su propia persona, había encontrado a su Salvador.

En cuanto a Felipe, fue llevado y luego encontrado en Azoto, la Asdod del Antiguo Testamento, otra antigua ciudad de los filisteos. Comenzando con este pueblo, viajó tranquilamente por la costa del Mediterráneo, predicando el Evangelio dondequiera que iba, hasta que llegó a la ciudad de Cesarea, que estaba a mitad de camino entre los pueblos actuales de Jaffa y Haifa. Nota: El Cristo exaltado fija el curso del Evangelio, ya sea que se predique en ciudades populosas o en lugares comparativamente deshabitados. Nuestra tarea es seguir Sus indicaciones y dejarnos guiar por las circunstancias a medida que Él las presenta, porque el fin es la salvación de las almas.

Resumen

Debido a la persecución de la congregación en Jerusalén, el Evangelio se difunde fuera de la ciudad, Felipe funda la iglesia en Samaria, que se establece después de una visita de Pedro y Juan, mientras que Felipe es enviado a enseñar el Evangelio al eunuco etíope y a bautizarlo.

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