• 1 Corintios 15:37

    Y lo que siembras, no es el cuerpo que ha de salir, sino el mero grano, ya sea de trigo o de otra cosa.

  • 1 Corintios 15:38

    Pero Dios le da un cuerpo como quiere, a cada semilla su propio cuerpo.

  • 1 Corintios 15:39

    No toda carne es la misma carne; sino que una es la carne de los hombres, otra la carne de los animales, otra la de las aves y otra la de los peces.

  • 1 Corintios 15:40

    También hay cuerpos celestiales y cuerpos terrenales. Pero de una clase es la gloria de los celestiales; y de otra, la de los terrenales.

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