• 1 Samuel 25:3

    El hombre se llamaba Nabal, y su mujer se llamaba Abigaíl. Ella era una mujer muy inteligente y bella, pero el hombre era brusco y de malas acciones. Él era del clan de Caleb.

  • 1 Samuel 25:4

    David oyó en el desierto que Nabal estaba esquilando sus ovejas.

  • 1 Samuel 25:5

    Entonces David envió a diez jóvenes, diciéndoles: — Suban a Carmel y vayan a Nabal. Salúdenlo en mi nombre

  • 1 Samuel 25:6

    y díganle así: “¡La paz sea contigo! ¡La paz sea con tu familia! ¡La paz sea con todo lo que tienes!

  • 1 Samuel 25:7

    He sabido que estabas esquilando. Ahora bien, tus pastores han estado con nosotros, y nunca les hicimos daño, ni les ha faltado nada durante todo el tiempo que han estado en Carmel.

  • 1 Samuel 25:8

    Pregunta a tus criados, y ellos te lo confirmarán. Por tanto, hallen gracia ante tus ojos estos mis jóvenes, porque venimos en un día de fiesta. Por favor, da a tus siervos y a tu hijo David lo que tengas a mano”.

  • 1 Samuel 25:9

    Cuando llegaron los jóvenes de David, dijeron a Nabal todas estas palabras en nombre de David, y se quedaron esperando.

  • 1 Samuel 25:10

    Entonces Nabal respondió a los siervos de David, diciendo: — ¿Quién es David? ¿Quién es el hijo de Isaí? Hoy hay muchos esclavos que se escapan de sus amos.

  • 1 Samuel 25:11

    ¿He de tomar yo ahora mi pan, mi agua y la carne que he preparado para mis esquiladores, para darlos a unos hombres que ni sé de dónde son?

  • 1 Samuel 25:12

    Los jóvenes de David se volvieron por su camino y regresaron; y cuando llegaron, refirieron a David todas estas palabras.

  • 1 Samuel 25:13

    Luego David dijo a sus hombres: — ¡Cíñase cada uno su espada! Y cada uno se ciñó su espada. También David se ciñó su espada, y subieron tras David unos cuatrocientos hombres, dejando otros doscientos con el equipaje.

  • 1 Samuel 25:14

    Pero uno de los criados avisó a Abigaíl, mujer de Nabal, diciendo: — He aquí que David envió unos mensajeros desde el desierto para que saludaran a nuestro amo, y él los ha despreciado,

  • 1 Samuel 25:15

    a pesar de que esos hombres han sido muy buenos con nosotros. Nunca nos han hecho daño ni nos ha faltado nada mientras hemos andado con ellos cuando estábamos en el campo.

  • 1 Samuel 25:16

    Nos han servido como muro de día y de noche, todos los días que hemos estado apacentando las ovejas entre ellos.

  • 1 Samuel 25:17

    Ahora pues, mira y reconoce lo que has de hacer, porque el mal está decidido contra nuestro amo y contra toda su casa, pues él es un hombre de tan mal carácter que no hay quien pueda hablarle.

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