Sí, haré que muchos pueblos se asombren de ti, y sus reyes se espantarán terriblemente por ti, cuando yo blandaré mi espada delante de ellos; y temblarán en todo momento, cada uno por su propia vida, en el día de tu caída.

Sí, haré que muchas personas se asombren de ti... cuando blandaré mi espada delante de ellos, literalmente, en su rostro o a la vista.

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