Y también les he retenido la lluvia, la lluvia tardía, que era necesaria para asegurar una cosecha, cuando aún faltaban tres meses para la cosecha, que ocurrió a finales de mayo o principios de junio; e hice llover sobre una ciudad y no hice llover sobre otra ciudad, concediendo y reteniendo esta gran bendición de acuerdo con Su voluntad; sobre un trozo llovió, y el trozo sobre el cual no llovió se secó.

Hasta el día de hoy, a pesar de las falsas afirmaciones de los científicos sobre las causas razonables de todo, ésta es la única explicación que basta para el hecho de que la humedad en una localidad determinada a menudo se encuentra sólo en franjas definidas.

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