Y vendrán y descansarán, todos ellos, en los valles desolados, más bien, en los valles de los declives, y en los huecos de las peñas, en las hendiduras de los montes, y sobre todos los espinos y sobre todos los arbustos, en todas las ricas praderas, con el objeto de devorar y destruir todo lo que se encuentra a la vista.

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