¿Robará un hombre a Dios, lo defraudará? ¿No es la misma idea absurda y repugnante ?. Sin embargo, me habéis robado, tratando de defraudar a Jehová del servicio que Él esperaba con razón. Pero decís: ¿En qué te hemos robado? Y la respuesta es: En diezmos y ofrendas, porque el pueblo los había retenido deliberadamente, burlándose así de su adoración a Jehová.

Continúa después de la publicidad
Continúa después de la publicidad