Salmo 139:1,2

Salmo 139:1 I. Ciertamente profundo y misterioso, mucho más allá de lo que podemos entender, es nuestro propio sueño y vigilia ordinarios; no sabemos cómo es que la tranquilidad reconfortante que llamamos sueño se apodera del alma y el cuerpo, ni cómo los dos se despiertan juntos y comienzan a actu... [ Seguir leyendo ]

Salmo 139:1-3

Salmo 139:1 El hecho de que Dios está siempre presente y conoce cada mínimo detalle de nuestras vidas, y que Su juicio infalible seguramente tomará en cuenta cada detalle de nuestro carácter y conducta, sin exagerar ni omitir, pero aplicando justicia absoluta, esta verdad es una de las que pierden... [ Seguir leyendo ]

Salmo 139:7

Salmo 139:7 I. Dios está en todos los modos de existencia personal. Todos estos están cubiertos por el contraste entre el cielo y el infierno, que ninguna palabra sugeriría un contraste más completo con cada hebreo reflexivo. II. La presencia de Dios está en los caminos aún desconocidos de la hist... [ Seguir leyendo ]

Salmo 139:11

Salmo 139:11 I. Existe la oscuridad de la perplejidad. Si alguna vez vale la pena pensar en cuáles han sido nuestros momentos más infelices, descubriremos que han sido aquellos en los que nuestra mente estaba dividida. El lenguaje de nuestro corazón en ese momento sería: "Señor, dame luz; haz claro... [ Seguir leyendo ]

Salmo 139:14

Salmo 139:14 Observemos algunos de los misterios que están involucrados en nuestra propia naturaleza. I. Estamos hechos de alma y cuerpo. Ahora bien, si no supiéramos esto de modo que no podamos negarlo, ¿qué noción podría formar nuestra mente de tal mezcla de naturalezas? ¿Y cómo podríamos lograr... [ Seguir leyendo ]

Salmo 139:19-24

Salmo 139:19 I. Hay una peculiaridad de expresión en este Salmo que ciertamente no deberíamos encontrar en ningún himno cristiano, y una que no puede dejar de sorprendernos. ¿Qué puede ser más notable que el contraste entre la primera parte del texto y la sublime meditación que la precede? Nos sorp... [ Seguir leyendo ]

Salmo 139:21

Salmo 139:21 El salmista responde a su propia pregunta: "Sí, los odio con todas mis fuerzas, como si fueran mis enemigos". La mayoría de nosotros deberíamos responder de manera muy diferente. Deberíamos decir: ¡Odíalos! No odiamos nada. Tratamos de obedecer el mandato de Cristo: "Ama a tu prójimo c... [ Seguir leyendo ]

Salmo 139:23,24

Salmo 139:23 I. Estas palabras expresan un llamado a la omnisciencia de Dios como prueba de la sinceridad del amor del salmista por él. Hay un franco afecto y candor en las palabras a las que corresponde fácilmente el corazón de nuestra propia experiencia personal. Respiran el tranquilo reposo de q... [ Seguir leyendo ]

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