Entonces Acab subió a comer y beber. Y Elías subió a la cumbre del Carmelo; y se postró en tierra, y puso su rostro entre sus rodillas,

Ver. 42. Y Elías subió a la cima del Carmelo. ] Allí, como en su oratorio ordinario, para orar la promesa de la lluvia, para ponerlo en traje, y esto lo hizo con lujuria, Santiago 5:17, esforzando, por así decirlo, cada vena de su corazón: porque,

Se arrojó sobre la tierra, ] sc, de rodillas.

Y puso la cara entre las rodillas. ] Para mostrar su gran humildad y fervor. Se arrodilló ante Dios, su rostro se inclinó sobre sus rodillas: con esta humilde postura ambos reconociendo sus humildes respetos a esa Majestad que imploró; y, además, ocultaba los ojos de todos los objetos que lo distraían, de modo que pudiera prestar más atención al trabajo que realizaba. Algunos observan aquí que el bebé en el útero yace en este tipo, con la cabeza entre las rodillas; exponiendo tácitamente su propia miseria e implorando la misericordia de Dios para traerlo a la luz.

Quo in statu sese composuit ter maximus Elias abiectissimae suae conditionis memor, ut caelum votis ira conceptis aperiret: quae certe conditio in utero mirabili, superbos ab arrogantia revocare deberet, dice Bodine. a El gran profeta Elías oró en esta postura, expresando y aumentando así su devoción. Dejemos que los hombres orgullosos recuerden sus malos comienzos y tomen sus crestas.

a Theatr. Naturae p. 428.

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