A Darío le agradó poner sobre el reino ciento veinte príncipes, que deberían estar sobre todo el reino;

Ver. 1. Le agradó a Darius. ] Chald., Pulchrum fuit coram Dario. Sabía que debía observarse el orden, o el reino no podría continuar; él mismo también era viejo y necesitaba ayudantes. Fue suficiente honor y trabajo para él illos iudicare quos constituit iudices aliorum nombrar a otros para juzgar también, como Petr. Blesensis dice que nuestro Enrique II lo hizo: juzgar a aquellos a quienes había hecho jueces de otros. El gran turco lo hace hasta el día de hoy, de donde pocos de sus grandes, especialmente sus visires, o sus principales oficiales, mueren en sus camas.

Ciento veinte príncipes. ] Por sus ciento veinte provincias, que luego llegaron a ser ciento veintisiete. Est 1: 1 Monarchs siempre se sumarán.

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