Le plació a Darío poner sobre el reino ciento veinte príncipes, que deberían estar sobre todo el reino;

Darío. Grotefend lo ha leído en las inscripciones cuneiformes de Persépolis, como Darheush, es decir, Señor-rey, un nombre aplicado en común a muchos de los reyes medopersas. Aparecen tres del nombre; Darius Hystaspis, BC 521, en cuyo reinado se llevó a cabo el decreto, originalmente emitido por Ciro, para la reconstrucción del templo; Darius Codomanus, 336 aC, a quien Alejandro venció, llamado "el persa", una expresión utilizada después de que se estableciera el gobierno de Macedonia (una sorprendente prueba espontánea de la autenticidad y autenticidad de Nehemías); y Darío Ciaxares II, entre Astiages y Ciro (Esquilo, 'Persia', 762, 763), a quien se refiere aquí, el rey bajo el cual Ciro, como príncipe subordinado, tomó Babilonia, 538 a. C. Darío parece haber sido un nombre común de los reyes de Medo Persia, así como Faraón era común a muchos reyes de Egipto, y César era el nombre común de muchos emperadores romanos; de modo que el que aquí se llama Darío, en los autores paganos se llama Ciaxares II.

Le complació a Darío poner sobre el reino ciento veinte príncipes, es decir, sátrapas; según Jenofonte, fueron puestos sobre las provincias conquistadas (incluida Babilonia) por Ciro (Jenofonte, 'Cyropaedia,'viii., 6: 1). Sin duda Ciro actuó bajo Darío, como en la captura de Babilonia; de manera que Daniel atribuye correctamente el nombramiento a Darío (ver mi comentario,). Dado que Darío se entregó a la sensualidad (según Jenofonte), probablemente entregó su autoridad principalmente a su enérgico yerno y sobrino, Ciro, de modo que su reinado se fusionó con el de Ciro, y así pasó desapercibido por completo. Herodoto y Ctesias.

Esto responde a la objeción a la Escritura derivada del silencio sobre Darío en estos dos últimos autores. La autoridad de Daniel, como contemporáneo de Darío, está muy por encima de la de los autores que vivieron mucho después de los tiempos de los que escriben.

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