También los hijos de los que te afligieron vendrán inclinados hacia ti; y todos los que te despreciaron se postrarán a las plantas de tus pies; y te llamarán Ciudad de Jehová, Sión del Santo de Israel.

Ver. 14. Los hijos también de los que te afligieron. ] Cuando regresen una vez y disciernan entre los justos y los malvados, como Mal 3:18, se producirá una extraña alteración en ellos, como ocurrió en Pablo, Cipriano, Vergerio, Latimer y otros.

Se postrarán a las plantas de tus pies. ] Tal era la costumbre de los orientales; y esto, dicen los escritores papistas, se cumple en su vice-dios, como mejor podríamos llamarlo, en el peor sentido. El primero que extendió sus pies para que lo besaran fue Dioclesiano el Tirano. a

un Eutrop.

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