Pero él [está] en una [mente], ¿y quién puede convertirlo? y [lo] que su alma desea, aun [eso] él hace.

Ver. 13. Pero él está en una sola mente, y ¿quién puede convertirlo? ] Él es siempre como él mismo, no mutable, inconstante o variado, como los hombres que son (como dice Tertuliano del pavo real) todos en colores cambiantes, tan a menudo cambiados como conmovidos. El nombre de Dios es "Yo soy", Éxodo 3:14 . Y si Pilato pudiera decir: Lo que escribí, escribí, nada se modificará; ¡Cuánto más el Señor, que es el mismo ayer, hoy y siempre! Sus decretos son inmutables, su poder irresistible.

Algunos piensan que Job se queja aquí del poder absoluto de Dios, y poco menos que tiránico, ejercido contra él, una persona inocente. Si es así, seguramente Job tenía mucha culpa, ya que el poder absoluto de Dios nunca se separa de su justicia; y debe tomarse por una verdad indudable que sus juicios son a veces secretos, pero siempre justos.

Y lo que su alma desea, aun lo que hace ] Id est, Cupit ac facit statim; eius voluntas est ejecutio; es decir, lo desea y lo hace inmediatamente; su voluntad es ejecución presente. Es un placer para él cargarme con muchas aflicciones, pero no sé por qué. Pero Job debería haber sabido que así como Dios es un agente libre, su voluntad no es sólo recta (correcta) sino regula; (la ley) tampoco ningún hombre aquí puede presumir de reprender lo que no puede comprender.

Continúa después de la publicidad
Continúa después de la publicidad