Jueces 17:8

Y el hombre salió de la ciudad de Belén de Judá para residir donde pudiera encontrar [un lugar]; y llegó al monte de Efraín a la casa de Micaía, de camino.

Ver. 8. Residir donde pudiera encontrar un lugar. ] Por la iniquidad de la época, fue puesto a sus turnos y obligado a buscar una subsistencia donde pudiera conseguirla. Véase algo similar en Nehemías 13:10,11 . Los ministros no son del tipo camaleónico: no pueden vivir del aire. Es una cosa triste que Lutero se viera obligado a quejarse, Spoliantur parochiae et scholae non aliter ac si fame necare nos velint: Roban parroquias y escuelas, como si tuvieran la intención de matar de hambre al ministerio.

Fue una confesión ingenua de ese sacerdote papista, pero una vergüenza para los que se lo impusieron. Predicamos el evangelio, tantum ut nos pascat et vestiat, sólo por comida y vestido. En muchos lugares no dejan al buey nada más que paja para trillar, y tanta paja como les plazca. ¡Oh tempera!