Y dividió a los trescientos hombres [en] tres compañías, y puso trompeta en la mano de cada uno, con cántaros vacíos y lámparas dentro de los cántaros.

Ver. 16. Una trompeta en la mano de cada hombre.] Como si hubiera habido tantas tropas como trompetas. Con una estratagema similar, Pompeyo venció a Mitrídates en Asia.

Con cántaros vacíos y lámparas dentro de los cántaros. ] A esto parece aludir el apóstol cuando, hablando de la luz del evangelio, dice: "Tenemos este tesoro en vasos de barro, para que la excelencia del poder sea de Dios, y no de nosotros". 2 Cor 4: 7

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