No peleará ni llorará; ni nadie oirá su voz en las calles.

Ver. 19. No se esforzará ] Por quitarle la campana a los demás.

Ni gritar ] "Ni alzar la voz", dice el profeta, como reacio a permanecer escondido, y por lo tanto haciendo un "Oh sí", como deseoso de vanagloria y aplauso popular. Laudes nec curat nec quaerit humanas. Lo desprecia como un pequeño aliento apestoso, o como el babeo de los labios de los hombres que desdeña chupar.

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