El da la nieve como lana; esparce la escarcha como ceniza.

Ver. 16. Él da la nieve como lana ] Por blancura, ligereza, abundancia, suavidad, calor; porque la nieve, aunque es muy fría, sin embargo, al retener los vapores y exhalaciones de la tierra, le causa un calor interno, y así la hace muy fructífera, dicen los filósofos, Vellera nivis (Virg. Georg.). Al respecto, los rabinos dicen que un día de nieve hace más bien que cinco de lluvia.

Él esparce la escarcha como ceniza ] Cuando es arrastrado por el viento. También calienta y seca (como cenizas) la tierra fría y húmeda, corta las yemas de los árboles, etc. Unde pruina dicitur a perurenda, dice Sexto Pompeyo, Cinis monet ignem subesse quem foveat.

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