Lamentaciones 3:1-20

1-20 El profeta relata la parte más sombría y desalentadora de su experiencia, y cómo encontró apoyo y alivio. En el momento de su juicio, el Señor se había vuelto terrible para él. Era una aflicción que era la miseria misma; porque el pecado hace de la copa de la aflicción una copa amarga. La lucha... [ Seguir leyendo ]

Lamentaciones 3:21-36

21-36 Habiendo manifestado su angustia y tentación, el profeta muestra cómo fue elevado por encima de él. Por malas que sean las cosas, es debido a la misericordia de Dios que no son peores. Debemos observar lo que nos hace, así como lo que está en contra de nosotros. La compasión de Dios no falla;... [ Seguir leyendo ]

Lamentaciones 3:37-41

37-41 Mientras hay vida hay esperanza; y en lugar de quejarnos de que las cosas están mal, debemos alentarnos con la esperanza de que sean mejores. Somos hombres pecadores, y de lo que nos quejamos es mucho menos de lo que nuestros pecados merecen. Deberíamos quejarnos de Dios y no de él. Estamos ap... [ Seguir leyendo ]

Lamentaciones 3:42-54

42-54 Mientras más miraba el profeta las desolaciones, más se entristecía. Aquí hay una palabra de consuelo. Mientras continuaban llorando, continuaron esperando; y tampoco esperaba ni esperaría alivio y socorro de nadie más que del Señor.... [ Seguir leyendo ]

Lamentaciones 3:55-66

55-66 La fe sale del vencedor, porque en estos versículos el profeta concluye con cierto consuelo. La oración es el aliento del nuevo hombre, que dibuja el aire de la misericordia en las peticiones y lo devuelve en alabanzas; prueba y mantiene la vida espiritual. Silenció sus miedos y calmó sus espí... [ Seguir leyendo ]

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