El pozo se llamaba Beer - lahai - roi - El pozo del que vive y me ve. Es probable que Agar le haya puesto este nombre, y se mantuvo mucho después. Este fue el lugar donde el Dios de gloria manifestó el especial cuidado que tuvo con una pobre mujer en apuros. Aquellos que son graciosamente admitidos en la comunión con Dios y reciben de él los consuelos oportunos, deben decir a los demás lo que él ha hecho por sus almas, para que también ellos se sientan animados a buscarlo y confiar en él.

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