Juan 16:23

En aquel día nada me preguntaréis.

Cuando la nueva revelación se realiza plenamente y disfrutan de la plenitud de la presencia glorificada del Señor. "Ese día" se refiere directamente a Pentecostés cuando comenzó la nueva era de alegría. "Nada me preguntaréis" no se refiere a la oración, porque los apóstoles siempre continuaron orando, sino que significa que no le harán preguntas debido a su ignorancia y malentendidos. Mientras asistían a su instrucción terrenal, estaban torpes de comprensión y con frecuencia hacían preguntas porque no lo entendían, pero cuando viniera el Consolador, enseñaría todas las cosas a los apóstoles (14:26).

Se resolverían los enigmas, se aclararían los misterios. O el pasaje puede significar que no pedirán directamente a Jesús, como cuando estuvo en la tierra, sino al Padre en su nombre. Cualquiera de las interpretaciones está en armonía con el contexto y las enseñanzas de nuestro Señor. Toda oración ahora debe ofrecerse en el nombre de Cristo, y la respuesta se da en su nombre... crea que ambos significados están involucrados. En el versículo 17, los discípulos preguntan.

pregunta con desconcierto, y el Salvador en su respuesta declara que en "aquel día" no tendréis necesidad de pedir explicaciones, y luego añade, que la dispensación será de gran poder en la oración; "Todo lo que pidiereis en mi nombre del Padre, os lo dará".