Verso 14. Y esta es la confianza.

Si la palabra debe ser confianza o audacia, hará muy poca diferencia, como yo lo veo, porque si somos hijos de Dios y pedimos bendiciones, siendo la petición conforme a la voluntad de Dios, tenemos la palabra del Padre, que nadie debería duda, que oirá. Por lo tanto, podemos acercarnos con denuedo y con toda seguridad confiada a su trono de gracia diseñado para sus hijos.

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Antiguo Testamento