cuando trataron de ponerle las manos encima, el Sanedrín tenía como objetivo dos cosas: (1) capturar a Jesús rápidamente, porque la Pascua (durante la cual no se podían tomar medidas hostiles) estaba cerca; y porque se esperaba que Jesús saliera de Jerusalén después de la fiesta. (2) Para prenderlo aparte de la gente; porque los galileos no permitirían que nadie pusiera las manos sobre su Rey y Profeta. Solo la traición permitió a los judíos asegurar su fin.

Continúa después de la publicidad
Continúa después de la publicidad