Jueces 3:1-6

Naciones dejadas para probar a Israel Jueces 3:1-6

Estas son las naciones que dejó el Señor para probar con ellas a Israel, tantos de Israel como no habían conocido todas las guerras de Canaán;
2 Solamente para que las generaciones de los hijos de Israel supieran, para enseñarles la guerra, por lo menos los que antes nada sabían de ella;
3 A saber, cinco príncipes de los filisteos, y todos los cananeos, los sidonios y los heveos que habitaban en el monte Líbano, desde el monte Baal-hermón hasta la entrada de Hamat.

4 Y con ellos debían probar a Israel, para saber si obedecerían los mandamientos del Señor, que él ordenó a sus padres por medio de Moisés.
5 Y los hijos de Israel habitaron entre los cananeos, los heteos, los amorreos, los ferezeos, los heveos y los jebuseos:
6 Y tomaron a sus hijas por esposas, y dieron sus hijas a sus hijos, y sirvieron a sus dioses.
7 Y los hijos de Israel hicieron lo malo ante los ojos de Jehová, y se olvidaron de Jehová su Dios, y sirvieron a los baales y a las imágenes de Asera.

1.

¿Cómo aprendería Israel a hacer la guerra? Jueces 3:1

Aprender a hacer la guerra equivale a aprender a hacer la guerra contra las naciones de Canaán. Josué y los israelitas de su tiempo no habían vencido a estas naciones por su propio poder humano o por armas terrenales, sino por la ayuda milagrosa de su Dios que había herido y destruido a los cananeos ante los israelitas. La ayuda omnipotente del Señor, sin embargo, sólo se concedió a Josué y a toda la nación, a condición de que se adhirieran firmemente a la ley de Dios ( Josué 1:7 ) y observaran fielmente el pacto del Señor.

La transgresión de ese pacto, aun por parte de Acán, provocó la derrota de Israel ante los cananeos ( Josué 7 ). Las generaciones que siguieron a Josué habían olvidado esta lección y, en consecuencia, no sabían cómo hacer la guerra. Para inculcarles esta verdad, el Señor había dejado a los cananeos en la tierra. La necesidad enseña al hombre a orar. La angustia en la que los israelitas fueron llevados por los cananeos restantes fue un castigo de Dios, a través del cual el Señor deseaba llevar a los rebeldes a sí mismo.

2.

¿Qué cinco señores de los filisteos oprimieron a Israel? Jueces 3:3 Estos reyes son gobernadores de las ciudades-estado de Gaza,

Ascalón, Asdod, Ecrón y Gat; y se nombran en Josué 13:3 . Las cinco ciudades sobre las que gobernaron se conocían como la Pentápolis filistea. Fueron importantes durante la época de los jueces y hasta la época de David. Si uno tuviera que elegir a una determinada nación como enemiga de Israel, los filisteos probablemente serían la elección; y los príncipes de estas cinco ciudades eran los jefes de los filisteos.

Jugaron un papel importante en la derrota de Sansón, ya que sobornaron a Dalila para conocer su secreto ( Jueces 16:5 ; Jueces 16:8 ).

3.

¿Qué divisiones de los cananeos se notan? Jueces 3:5

Los cananeos eran todos descendientes de Cam, hijo de Noé, pero estaban divididos en muchas familias. Los hititas eran descendientes de Het. Los amorreos eran los que vivían en las ciudades y se remontan a Amor. Los ferezeos también eran aldeanos. Los heveos eran una rama particular de los cananeos que vivían en el norte, cerca del monte Líbano, desde Baal-hermón hasta Hamat ( Jueces 3:3 ).

Los gabaonitas también eran llamados heveos ( Josué 9 ). Los jebuseos eran una rama de los cananeos que vivían en Jebús, el lugar que más tarde se conoció como Jerusalén. Todos estos eran grupos de cananeos que vivían en la tierra que les había sido prometida a los israelitas.

4.

¿Qué eran las arboledas? Jueces 3:7

Para arboledas, algunos textos dicen Imágenes de madera. Esta palabra se traduce Asheroth en la versión estándar americana. Muchas de las imágenes de dioses paganos fueron erigidas en arboledas en lugares altos. En estos lugares se reunían los cananeos; e indudablemente invitaron a sus vecinos y captores israelitas a adorar con ellos. El hecho de que se afirme que Israel sirvió a las arboledas sugiere que el pueblo estaba en cautiverio espiritual en esta adoración idólatra.