28. Entonces, con respecto a ellos, Moisés ordenó. Moisés anexa estas condiciones a su decisión, no sea que, cuando los rubenitas y sus compañeros hubieran cumplido sus tareas militares: deberían alegar falsamente que habían pasado por Jordania con el propósito de buscar un nuevo hogar; mientras que, al mismo tiempo, si debían engañar a las otras tribus, él les proporcionó que su cobardía y su engaño no deberían beneficiarlos. En resumen, si ayudaron a sus hermanos a cumplir su acuerdo, él ordena que el territorio, que ahora les concede, siempre debe ser suyo; pero, si se apartaron de su promesa, él los obligaría contra su voluntad a participar en la asignación común. Porque él no les asigna esta porción en medio de Canaán como recompensa por su inercia, en caso de que se queden atrás; pero significa que deben ser llevados a la fuerza y ​​con autoridad hacia adelante, a fin de estar sujetos a sus hermanos en todas las circunstancias; ya que no era legal para ellos consultar sus propios intereses separados.

Al establecer reglas para la división de la tierra, como si fuera a suceder pronto, alienta a las mentes de todos a confiar, para que se apresuren más alegremente a pasar por alto; como si la victoria no solo estuviera ya en sus manos, sino que los frutos de la misma pronto se disfrutaran.

Continúa después de la publicidad
Continúa después de la publicidad