Oh Señor, no me reprendas en tu ira - Ver las notas en Salmo 6:1, donde ocurre el mismo idioma, excepto en el cambio de una sola "palabra" hebrea, es decir, "ira", aunque expresa la misma idea.

Ni me castigas con tu disgusto - Mira las notas en Salmo 6:1. El hebreo en ambos es el mismo, excepto que en este lugar se omite la partícula negativa, pero sin afectar el sentido. No es improbable que uno haya sido copiado del otro, o que este haya sido compuesto con el lenguaje del primero en la memoria. Por lo tanto, a menudo usamos un lenguaje con el que estamos familiarizados, ya que estamos bien adaptados para expresar nuestras ideas.

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