Luego vinieron los alguaciles a los principales sacerdotes , etc. Es decir, sin lograr el propósito para el que fueron enviados; y los jefes de los sacerdotes y otros miembros del sanedrín, percibiendo que los oficiales no habían ejecutado su comisión; dijo: ¿Por qué no lo habéis traído conforme a las órdenes que habéis recibido de nosotros? Los oficiales respondieron: Nadie habló como este hombre. Seguramente ningún hombre vivo se dirigió jamás a sus oyentes de una manera tan atractiva e irresistible. Parece que tuvieron la intención de insinuar que, si los principales sacerdotes y los fariseos lo hubieran escuchado ellos mismos, su discurso debió haber desarmado su resentimiento contra él.

Entonces respondieron los fariseos: Lejos de ablandarse por el relato que dieron los oficiales; ¿ Os habéis engañado también vosotros, que tenéis la ventaja de conocer nuestros sentimientos acerca de este hombre? Tenga alguno de los gobernantes Hombres de rango o eminencia; o de los Fariseos Hombres de erudición o religión; creyó en él? Pero este pueblo Οχλος ουτος, este pueblo; que no conoce la ley Esta chusma ignorante; de modo que fingieron llamar a los amigos de Cristo; están malditos Están, por esa ignorancia, expuestos a la maldición de ser así seducidos.

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