Un hipócrita con su boca Por su comunicación corrupta; destruye a su prójimo, lo arrastra al error o al pecado; sino por el conocimiento , es decir, de Dios y de su palabra, que, haciendo sabios a los hombres, descubre y así previene los fraudes de los engañadores; Será librado el justo de la infección del mal y del astuto consejo de los hipócritas.

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