Mi alma espera al Señor Este verso del original es notablemente conciso, contundente y elegante. Es, literalmente, mi alma por el Señor (es decir, espera) más que vigilantes de la mañana, que vigilantes de la mañana.Se cree que el salmista se refería a aquellos que vigilaban la noche en la ciudad, o los sacerdotes o levitas que vigilaban en el templo; quienes, cansados ​​por el arduo servicio y la falta de descanso, deseaban fervientemente y esperaban ansiosamente el amanecer para ser liberados de sus deberes. O, como el Dr. Hammond y algunos otros interpretan las palabras, se refiere a los sacerdotes, o sus oficiales, "que fueron designados de manera peculiar desde una torre para esperar la primera aparición del amanecer". Las repeticiones en este versículo y en el anterior expresan hermosa y con fuerza ese ardiente deseo con el que los verdaderos arrepentidos esperan y anhelan la salvación de Dios.

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