¿Qué puede tener más que el reino? - En esta premonitoria expresión de Saúl estaba envuelta no sólo una conjetura que el resultado confirmó, sino una profunda verdad interior: si el rey permaneciera impotente ante los subyugadores de su reino en un período tan decisivo como este, y un pastorcillo viniera y decidió la victoria, esto fue una señal adicional de su rechazo. - V. Gerlach, citado en Keil.

Habían pasado algunos años desde que escuchó por primera vez de labios de su viejo amigo profeta la sentencia divina de su rechazo del reino. En ese triste período sin duda había estado al acecho del destinado por el Rey Invisible a ser su sucesor. Esta pavorosa expectativa de ruina y destronamiento había sido un factor poderoso en las causas que habían llevado al desquiciamiento de la mente de Saúl. ¿No era este talentoso pastor, ahora el ídolo del pueblo, la futura esperanza de Israel?

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