Estar lleno del Espíritu Santo. - Hay algo sugestivo en el hecho de que esta descripción llegue al final, como al principio, del registro de la obra de San Esteban ( Hechos 6:8 ). Desde el principio hasta el final, se había destacado por manifestar el poder de la vida superior que, por así decirlo, había iluminado y transfigurado todo su ser. El griego “estar lleno” implica, no una inspiración repentina, sino un estado permanente.

Y vio la gloria de Dios. - Esteban había comenzado hablando del "Dios de gloria" ( Hechos 7:2 ). Termina con la visión de esa gloria como perteneciente al Hijo del Hombre. El hecho se infirió en parte, podemos creer, de la expresión absorta y fija del rostro del mártir, en parte de las palabras que siguieron, interpretando esa mirada hacia arriba. En cuanto a la palabra que significa “miró hacia arriba con determinación”, vea la Nota sobre Hechos 3:4 .

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