Para mi siervo Jacob ... - Las palabras "siervo" y "elegido" muestran que el profeta habla del Israel ideal, la verdadera Ecclesia, más que de la nación como tal exteriormente, aunque esto también, incluyendo al otro, compartía en las bendiciones externas de la elección. Esencialmente, las palabras declaran que la historia del mundo está ordenada con miras a la verdadera Eeclesia.

Te llamé por tu nombre. - Ya sea como prediciendo el nombre real de Koresh, o como dando los títulos de "Mesías" y "pastor". El apellido se refiere claramente a estos.

Aunque no me conociste. - Mejor, cuando no me conocías, ya sea como referido a un tiempo anterior al reconocimiento por Ciro de Jehová como el Dios del cielo ( Esdras 1:1 ), o, posiblemente, antes de su nacimiento (comp. Isaías 49:1 ; Jeremias 1:5 ).

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