Versículo 30. También de vosotros mismos...  De vuestra propia asamblea se levantarán hombres que hablen cosas perversas , enseñando como verdad lo que es erróneo en sí mismo, y perverso de la genuina doctrina de Cristo crucificado.

Para alejar a los discípulos... Para hacer cismas o rupturas en la Iglesia, con el fin de conseguir ganancias para ellos mismos . Véase, aquí, la causa de las divisiones en la Iglesia:

1. Los superintendentes pierden la vida de Dios, descuidan las almas del pueblo, se vuelven codiciosos de ganancias y, mediante extorsiones seculares, oprimen al pueblo.

2. Los miembros de la Iglesia, así descuidados, oprimidos e irritados, se alejan de sus rapaces pastores.

3. Hombres de puntos de vista siniestros se aprovechan de este estado de distracción, fomentan la discordia, predican la necesidad de la división , y así la gente se separa del gran cuerpo y se asocia con aquellos que profesan cuidar de sus almas y que niegan todos los puntos de vista seculares.

En este estado de distracción, es una gran prueba del amor de Dios a su herencia, si se encuentra uno que, poseyendo la verdadera doctrina y espíritu apostólico , se levanta para llamar a los hombres a la verdad primitiva y restaurar la disciplina primitiva. Cuán pronto surgieron los lobos rapaces y los maestros perversos en las Iglesias de Asia Menor, nos informan los primeros capítulos del Apocalipsis.

Los nicolaítas casi habían arruinado la Iglesia de Éfeso , Apocalipsis 1:2 , Apocalipsis 1:6 . La misma secta, con otros falsos maestros, infestaron la Iglesia de Pérgamo , y allí se predicó la doctrina de Balaam , Apocalipsis 2:14 . Una falsa profetisa sedujo a la Iglesia de Tiatira , Apocalipsis 2:20 . Todas estas Iglesias estaban en Asia Menor, y probablemente obispos o ministros de cada una estuvieron presentes en esta convocatoria.

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