Versículo Salmo 24:7 . Alzad vuestras cabezas, oh puertas. La dirección de los que precedían al arca, dirigiéndose a las puertas en lugar de a los guardianes de las mismas. Se alude aquí a la entrada triunfal de un general victorioso en la ciudad imperial.

En el himno de Calímaco a Apolo, hay dos versos muy parecidos a los del texto; transmiten los mismos sentimientos. El poeta representa al dios entrando en su templo, y pide a los sacerdotes que abran las puertas.

Αυτοι νυν κατοχηες ανακλινεσθε πυλαως,

Αυται δε κληιδες- ὁ γαρ Θεος ουκ ετι μακραν;

"Retroceded, cerrojos de las puertas del estanque, ceded;

Porque no está lejos el dios del día".

Callim. Himno en Apol., ver. 6, 7.


Todo este himno contiene excelentes sentimientos incluso sobre el tema de los Salmos.

Puertas eternas. Parece que aquí se hace referencia a algo parecido a nuestro rastrillo, que cuelga mediante tiradores por encima de la puerta, y que se puede bajar en cualquier momento para evitar que la puerta sea forzada. En el caso al que se refiere el salmista, el rastrillo se baja y las personas que preceden al arca ordenan que se levante. Cuando se levanta, y aparece por encima de la cabeza o la parte superior de la puerta, entonces se dirigen a las puertas plegables: "Levantad, puertas eternas"; que no haya ningún obstáculo, y entrará el poderoso Conquistador, el Rey de la gloria, cuya presencia está con el arca, y en la que aparece el símbolo de su gloria. Haced los debidos preparativos para admitir a tan augusto y glorioso Personaje.

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