Luego llevó a su hijo mayor, eso debería haber reinado en su lugar ,. No es el hijo mayor del rey de Edom, a quien el rey de Moab tenía en sus manos antes, lo que hizo que el rey de Edom estaba más dispuesto a unirse a esta expedición para la recuperación de su Hijo, como piensa Joseph Kimchi; O quien tomó ahora en su salsa sobre él, como Moisés Kimchi y Ben Gersom, procediendo a un sentido erróneo de Amós 2:1 para que el rey de Edom no podría tener un hijo que tenía un derecho, o fue diseñado para sucederlo, ya que él era más que un rey diputado mismo; Y además, el sacrificio de él no era la manera de hacer que los reyes elevaran el asedio, sino más bien provocarlos para presionarlo más de cerca: era el rey de Moab que llevaba a su hijo y al heredero a la corona,.

y le ofreció una oferta quemada sobre la pared ; que podría ser visto por el campamento de Israel y mover su compasión; o más bien, esto se hizo como una acción religiosa, para apaciguar la deidad por un sacrificio humano, tan querido y precioso, para dar éxito, y hacer que el enemigo rompa el asedio; y se ofreció al verdadero Dios, el Dios de Israel, con imitación de Abraham, como algunos escritores judíos Fancy N, o con su ídolo Chemosh, el sol; y Jarchi observa, de una exposición de los suyos, que "Vau" está queriendo en la palabra para la pared, por lo que puede interpretarse del sol, hacia lo que se ofreció esta ofrenda quemada; y se observa, desde varios autores paganos, que fue habitual con los paganos, cuando en calamidad y angustia, ofrecerle a sus dioses lo que era más querido y valioso para ellos; Y particularmente los fenicios o, y de ellos, los cartagineses tenían esta costumbre, que a la vez ofrecían doscientos hijos de su nobleza, para apaciguar a sus dioses P:

y hubo gran indignación contra Israel ; no del rey de Edom contra ellos, por no rescatar a su hijo, ni porque eran los medios de este desastre lo que lo llamaba; Pero del rey de Moab, que estaba bastante desesperado, y decidido a mantener el asedio al máximo extremo: y se fueron, y regresaron a su propia tierra; Los tres reyes, el de Edom, el otro a Israel, y el tercero a Judá; Cuando vieron a los moabitarios venderían sus vidas, así que querida, y espera al último hombre, pensaron en forma para romper el asedio; y quizás se vieron muy afectados con la visión impactante bárbara que habían visto, y podrían temer, si se quedan, se habrían hecho algo más del tipo de gusto.

n t. Bab. SANHEDRIN, FOM. 39. 2. Pesikta en Abarbinel en LOC. o vid. Euseb. Evangel. Praepar. l. 1. C. 10. pag. 40. l. 4. C. dieciséis. pag. 156. Pórfido. de abstinentia, l. 2. secta. 56. Vid. Aelio. Vást. Hist. l. 12. C. 28. P Diodor. Sicul. Bibliothec. l. 20. pag. 756.

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