Y todos los que los oyeron, los guardaron en su corazón, diciendo: ¡Qué niño será éste! Y la mano del Señor estaba con él.

(e) Pensó en ellos con diligencia y seriedad, y por así decirlo, los imprimió en sus corazones.

(f) Es decir, el favor presente de Dios, y apareció en él un tipo singular de virtud.

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