Coloco este versículo solo, para que el lector lo considere un poco más particularmente. Es Jehová el Padre quien está hablando aquí, y por lo tanto puede suponerse que está hablando, en el primer sentido, de la persona de nuestro glorioso Mediador. Y entonces las palabras serán como si Jehová dijera: "Que él, como Dios, porque tal es y como tal es capaz, que se apodere de mí. Porque teniendo ambas naturalezas, como Dios y hombre en una sola persona, él es capaz, en virtud de ambos, de apoderarse de ambas partes, Dios y hombre, y con la fuerza de Jehová, hacer la paz entre ambos, "por la sangre de su cruz.

"Y si consideramos las palabras como la dirección dada a la Iglesia, aunque todavía con referencia a Cristo, la dirección es:" Que el pobre pecador, en todo estado y bajo todo ejercicio, se aferre a Cristo, mi fuerza, y descanse en él por fe, en una firme dependencia de su salvación; y hallará paz conmigo. "¡Lector! ¡Qué preciosa promesa, fundada en un precioso Salvador!

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